Samuel Hahnemann nació el 1755 en Meissen, Alemania.

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​Acordándose de la fórmula de Hipócrates (hasta entonces incomprendida) "similia similibus curantur", dedujo de ella la ley que dio origen a la homeopatía: "para curar una enfermedad hay que administrar un remedio que provoque en el hombre sano los mismos efectos que se observan en el enfermo". Esta teoría levantó una protesta general en el cuerpo médico, que trató a Samuel Hahnemann de charlatán.
Hahnemann junto con Claude Bernard sostenían que el terreno interior era la causa de las enfermedades, y no los microbios como sostenía  Pasteur . Veían en el terreno orgánico el porvenir de la medicina, que debía ir hacia una inmunología individualizada adaptada al terreno de cada persona. Descubrieron que la sangre y los tejidos ácidos facilitan un terreno para que la enfermedad se desarrolle; cuando el terreno se acidifica, los microbios evolucionan a formas patógenas. Con el fin de equilibrarse, el organismo recurre a las reservas alcalinas de los huesos para impedir una elevada acidificación.